Este año se cumplen exactamente 50 años desde que la familia Espantoso se convirtió en propietario de Las Mañas. Tres generaciones sucesivas de Espantosos han transformado el pequeño y descuidado local de antaño en un vibrante y emblemático establecimiento, un restaurante sin igual en términos de ambiente y gastronomía española, no solo en Amberes, ni en Bélgica, sino en todo el mundo.
Muchas de estas historias han sido ahora recopiladas en un hermoso libro para leer, ver y cocinar. La historia de la familia gallega Espantoso, sus innumerables ampliaciones, sus contagiosas alegrías y sus penas a veces sin fondo, los avatares de cientos de marineros y camioneiros que encontraron en Las Mañas no sólo una mesa ricamente surtida y reconfortantes bebidas, sino también un refugio y una cama caliente... todo ello combinado con cientos de fotos y 50 recetas, los platos favoritos de 50 conocidos y habituales clientes del restaurante más sabroso, acogedor, marchoso y a veces ruidoso de la ciudad.
3 GENERACIONES SEGUIDAS
"Recuerdo muy bien a Miguel. Era un poco mayor que yo. Era una figura imponente que todo el mundo conocía, incluso entonces... Y todo el mundo sabía que era de Las Mañas. Él estaba en Ciencias A, yo en Económicas. Curioso: yo no llegué a economista, pero desde luego él tampoco llegó a científico. "
"No hay un segundo restaurante español como Las Mañas. Lo que siempre me llama la atención es que a través de tres, cuatro generaciones, el amor por este lugar se transmite en tantas familias. Siempre me gusta tanto venir aquí, que cada vez que entro siento: '¡sí, aquí es donde debo estar! No puedo expresarlo mejor.
El ambiente, la música, la comida, aquí han encontrado el equilibrio perfecto. De hecho, siempre es una fiesta".
"Conocí Las Mañas con motivo de la Worlds Ports Classic de 2015. Esa carrera ciclista de dos días llegó entonces aquí, en el Leien, cerca del restaurante. Entonces viví aquí horas agradables con antiguos ciclistas como Joop Zoetmelk, Roger De Vlaeminck, Jan Janssen y más bichos raros de las Mañas. Todos ellos estaban aquí alrededor del bar".
"Cuando entré aquí la primera vez, fue algo inverosímil: de repente volví a casa, fue como si Rayco fuera el hermano que nunca tuve y Miguel mi segundo padre. Eso es mágico, esa conexión natural. El nombre del libro está muy bien elegido: Cincuenta Años de Pasión, que es lo que somos, pasión. En el momento triste en que tuvimos que despedirnos de Yapsi, por ejemplo, es cuando te das cuenta de lo queridos que son los Espantosos. "v
